Ya sé acaba el año, los atardeceres son más tempranos, los 31 días que van quedando. La última liquidación de sueldo para algunos, el último mes de amor, decisión sí vivir o colgarse del monte más alto, sintiendo la presencia más cerca del cielo y del mismo dios. El ocaso dando el pase para muchos mortales que su horario de salida rutinaria es a la 7.
Yo corro por llegar al norte para escribir nuevas historias, y llegar renovada el otro año abrazando America sin cuidado.
Últimos 31 días del año. Perdón, sabiduría, recoge la basura mental, quémala. Y cuida tus pasos que cerca hay alguien que te puede hacer alguna zancadilla, usa tranquilidad, regala una flor hablando pal cielo, y respira profundo cuando los árboles respiran sin cesar.