Solo veo lo que me parece raro o fantástico. Creo yo.
Que el destino es mirar, y observar lo más raro que pisa la tierra.
Debo mirar por aquel callejón que vi,
Como te iva vestido de negro y azul, intentando de parar aquella micro que te deja cerca de tú casa.
Me gusta mirar las sombras anónimas.
Son tan incierta, pero fantástica, utópica y abecés irreal.
Te puedo contar una idea. Un cuento de la sombra que pasó junto a mí, por un callejón no tan cerca, y tampoco tan lejos de mi hogar.
Suelo pasar por ahí: bailando, soñando, gritando, reiendo, llorando o solamente paso por ahí.
La sombra de un vagabundo siempre es la primera que se puede ir a la mente, cuando andes por los callejones.
Así son las sombras. Las ves rara pero te agrada.
Solo son sombras.
Y la tulla solo la miro cuando estas de espalda.
Salir en el momento exacto,así deslizarme rapido en los sueños.Siempre sere nostálgica de estos recuerdos.
19 de septiembre de 2006
La despedida ir o venir.
La despedida de ir o venir.
Muchas veces la despedida nos hace sentir felicidad,
Ya por un cuento que fue justo y preciso, y sabes que se va repetir una y otra vez. Sin embargo hay otras que no son resistibles.
Hay vacíos de ecos y ojos con destino al llanto.
¿Es necesario? Que cada cuadro, escena y clímax.
Sea así?
A mi ya no me gusta la despedida son tan inciertas.
Pero hay una que la escucho todos los días:
La de mi madre.
Ordena tú ropa y deja bien cerrada la casa.
Ese es su estilo de decir adiós, ante que ella no este.
Da una despedida de mandato o de orden.
Pero todo lo que dice es por un propósito; una aventura: un gesto noble.
O alo mejor no es tan así.
Pero así son la despedidas todos los días .Se le agrega algo más o se le quita.
Su despedida tiene su pizca de sal y abecés de dulzura.
Ir o venir.
Muchas veces la despedida nos hace sentir felicidad,
Ya por un cuento que fue justo y preciso, y sabes que se va repetir una y otra vez. Sin embargo hay otras que no son resistibles.
Hay vacíos de ecos y ojos con destino al llanto.
¿Es necesario? Que cada cuadro, escena y clímax.
Sea así?
A mi ya no me gusta la despedida son tan inciertas.
Pero hay una que la escucho todos los días:
La de mi madre.
Ordena tú ropa y deja bien cerrada la casa.
Ese es su estilo de decir adiós, ante que ella no este.
Da una despedida de mandato o de orden.
Pero todo lo que dice es por un propósito; una aventura: un gesto noble.
O alo mejor no es tan así.
Pero así son la despedidas todos los días .Se le agrega algo más o se le quita.
Su despedida tiene su pizca de sal y abecés de dulzura.
Ir o venir.
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