25 de octubre de 2006

La textura de la mar de constelaciones.Sin vos.

Aparentemente vuelo sin paracaídas, eso me tiene en ascua, de poder saber la respuesta en mi interior, de sentir que no ah pasado nada y que el parque no me da recuerdos.
Realmente la textura de la mar me hace sentir una sirena, en tiempo de broncearme juntos a los peces nocturnos.
Una noche. Mejor dicho ayer vi. Una parte de la estrella de David, y con mis manos delgadas me dio el impulso de hacer la parte que faltaba y sentirme en una linda constelación pasiva. Cosa que podrían compartir al revés y al derecho como si los días dieran vueltas en zigzag. Realmente las noches de hoy son agradables de dar una vuelta con un cordel azul y poder saltar a todos los malhechores y karmas en tu vida.
Salto! Que salto! Que no me pillan .Miro! que miro la virgen en el cerro del buen beat. Grito! que grito ahí viene las chicas con verde, amarillo y rojo.
Pienso! Y pienso y no me imagino las otras noches con un acompañante de corbata y blazer gris.

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