Fue casualidad en un vacío de andar por ahí o por la rutina. Pasando micros, perros, calles solas, y niños pidiendo más helado.
Pero siempre una fiel compañera acompañando después de esta pausa de soledad en un día distinto, así dicen. De seguir la rutina que regalos y torta feliz ,y con muchas velas .Pero esta vez no fue así, ni torta, ni familia, ni nada. Solo la música en mis oído, y una chica de color que estuvo ahí aperrando . De tanto ver autos y micros por aquí y por a ya, el rumbo fue el cerro llegar a una gran avita de flora y fauna.Sentada en el árbol y tomando un par de copas de vino mientras que la weed corría al revés y al derecho. Escapar fue pleno, aún que se sentía raro de no recibir las llamadas acostumbradas, pero en fin. la soledad es así pisa distinta pastas y aromas enriquece tú olfato en ocasiones.
Por lo mismo la pasta fue un baile por un par de horas de ahí a dormir.Las velas nunca de apagaron, nunca se vieron, nunca se pidió el deseo que se anhelaba.Pero si una compañía que venia desde lejos hasta el día siguiente.Caminando por el mismo lugar que se transcurre todos los días.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario